Doctrina Social de la Iglesia Católica
Nuestra Iglesia, desde fines del siglo XIX fue desarrollando, comenzando con el Papa León XIII, una serie de documentos que han ido conformado lo que hoy conocemos como la Doctrina Social de la Iglesia (DSI).
Como punto de referencia para adentrarnos en el mensaje de esta doctrina, les presentamos el Mensaje de la Conferencia Episcopal de Puerto Rico a finales del año 2022. Muchos de sus señalamientos podrían estar también dándose en otros países.
30 noviembre 2022 – Mensaje CEP (Conferencia Episcopal de Puerto Rico)
Mensaje de Adviento y de cara al año nuevo que se.
UNA RENOVADA ESPERANZA: ADVIENTO Y NAVIDAD SON MOMENTOS PARA COMENZAR
"La Palabra de Dios se hizo carne, y habitó entre nosotros ... " (Juan I, 14).
1. Vivir la Liturgia de Adviento y Navidad, para los creyentes cristianos, implica asumir hoy, en nuestro País y circunstancias, las opciones, enseñanzas y consecuencias, de la encarnación del Hijo de Dios. Nos asombra la enorme semejanza de las circunstancias de hace dos mil años, en el entorno judío, con las del Puerto Rico de hoy.
2. Cuando el Hijo de Dios se hizo hombre, se encarnó en la cultura de su pueblo. El Israel de entonces era un país invadido desde hacía casi setenta años por el imperio Romano, el más grande del mundo en aquel momento. Los judíos habían logrado algunos espacios de gobierno "propio", con un rey no-romano (Herodes), pero con un sistema economico, comercial, judicial y militar sometido a las decisiones de la metropoli.
3. El endeudamiento, para pagar las obras del gobierno y los impuestos crecientes, era la orden del día. Como consecuencia de esto, la población se fue empobreciendo cada vez más: tenían que descuidar su salud para poder pagar sus préstamos; la disminución de los ahorros era lo normal, para cumplir con las obligaciones con el Estado o con los acreedores privados. La dieta se hacía más deficiente; aumentaba la crisis de salud. Se multiplicaban el robo y la violencia. Era una sociedad perpleja ante el deterioro de su calidad de vida y de sus costumbres. (Cfr. Jeremías, Joaquim: Jerusalén en tiempos de Jesús).
4. En la colina donde se asentaba la capital, Sión, se permitían imágenes de los ídolos e imperaba la ley del mercado, contra el que Jesús tronó en su primera Semana Santa, volcando las mesas de los que habían convertido el Templo en "cueva de ladrones" (Mt. 21, 13). La corrupción de muchos gobernantes era escandalosa. Aumentaba el deterioro moral y la pobreza se encarnizaba en los más vulnerables: mujeres, viudas, niños y enfermos. Pero Jesús tomó partido por ellos. Nosotros también, frente a multiplicidad de formas de invisibilizar o de ignorar a otros, "seamos capaces de reaccionar con un nuevo sueño de fraternidad y de amistad social que no se quede en palabras". (FT 6)
5. Como pastores, los Obispos de Puerto Rico nos enfrentamos con una larga lista de cuestionamientos, que parecen no tener respuesta adecuada por las autoridades. A las crisis que supone el colonialismo -ya denunciado por esta Conferencia Episcopal Puertorriqueña en el pasado, sobre todo en la Carta "Hora de Fe y Esperanza", 2016, hay que agregar el creciente empobrecimiento, la emigración que amenaza con diezmar la población y una economía sostenida artificialmente con transferencias de capital, sin un verdadero plan de desarrollo que permita soñar con un futuro autosuficiente y digno.
6. Se nos ofrecen números de un crecimiento económico al que contradicen la inflación, los costos de la canasta básica de alimentos de cualquier ciudadano, así como la facilidad con que inversionistas extranjeros encuentran acomodo y terreno en los lugares más exclusivos de la Isla, en un tiempo en que las familias -sobre todo los nuevos matrimonios-ven como les aumenta el alquiler mensual y se hace cada vez más complicado encontrar un hogar donde residir, pagando una renta razonable. De nuevo el Hijo de Dios -los hijos de Dios-no tienen posada ...
7. A este diagnóstico hay que agregar el terrible deterioro de la salud de todo un pueblo, dramatizado por un sistema que se ha convertido, tras su privatización, en un negocio en vez de un servicio. Teniendo uno de los sistemas de salud más caros y a la vez más ineficientes del mundo en cuanto a la relación dinero invertido-servicio. ¿Cuánto tiene que esperar un ciudadano promedio para conseguir una cita médica con un especialista? ¿cuánto cuestan sus tratamientos? ¿Qué tiene que sacrificar para poder completar el pago de sus recetas o exámenes? Todo eso sin mencionar el endémico problema de las larguísimas esperas tanto en las oficinas de los médicos como en las salas de emergencia.
8.Ante la crisis educativa, de salud, de violencia y seguridad pública, ambiental, de migración, de corrupción y empobrecimiento, y ante la angustiosa e injusta crisis energética del País ...pareciera que la única respuesta de las autoridades del gobierno es la espera por transferencias de fondos federales y la privatización de bienes, sobre todo de servicios básicos. De nuevo nos preguntamos, ¿es la solución la mera inyección de capital de los llamados beneficios federales o la fe ciega en la privatización? ¿No será más urgente un detente y una convocatoria -como se propone en la carta "Artesanos de la paz" #20 (2021)- para que, en un diálogo de pueblo y con los mejores talentos del País, podamos replanteamos el modelo económico y de gobernanza que llevamos, y que claramente no nos está dando el resultado esperado?
9. ¿A dónde viene a parar toda esta situación de crisis y presión social? Somos testigos de que el nicho que más se afecta es la familia. Allí comienza y termina el día de cada ciudadano puertorriqueño, y allí se acumula la crisis, causa inmediata del incremento de la violencia doméstica y del deterioro en las relaciones. Nos toca apoyar ese hogar, ese pesebre, con todo lo que esté a nuestro alcance. Al Estado corresponde crear leyes que la favorezcan, desde su concepción hasta su culminación natural; y fomentar en todo lo posible la convivencia y el desarrollo de la iniciativa y florecimiento de cada integrante de la familia.
10. Llega el tiempo de Navidad y de un nuevo año. Proponemos una vez más, que se convoque a todos los sectores de nuestro pueblo a un diálogo que nos permita mirar más allá de las visiones exclusivas de los partidos políticos, para romper el círculo del partidismo y abrir espacios a nuevas perspectivas. En los mejores momentos de desarrollo de este pueblo el factor clave ha sido la concurrencia de su mejor talento que es su gente. Solicitamos que sean reconvocados todos los sectores, porque la situación es urgente y no puede tomarse a la ligera. Es hora de reconocer que el mero fluir de dinero no soluciona la crisis apremiante del ser humano. El momento requiere consensuar acciones y respuestas en espacios de diálogo sosegados, con respeto, para analizar la realidad que estamos viviendo.
11. Jesucristo nos dejó una lección impresionante: él quiso transformar el mundo con un puñado de soñadores jóvenes, prácticamente sin dinero y sin influencias poderosas, pero absolutamente convencidos de la superioridad de la conciencia del bien común, guiados por la fe y por un amor a Dios y a la humanidad que es más grande que las riquezas humanas. Lamentablemente este sueño de Jesús ha sido pobre y desigualmente asumido, incluso contradicho en la historia por quienes le proclamamos Señor y Maestro. El momento es muy grave y supone un desafío mayor, por eso se requieren visiones amplias. Y aunque nosotros como Iglesia tenemos mucho que aprender y mejorar estamos disponibles para encontrar juntos, con la ayuda de Dios, caminos que redunden en la recuperación del País, pues creemos que los valores espirituales y religiosos son parte esencial de la identidad de la inmensa mayoría de nuestro pueblo.
12. Los desafíos son muy grandes, parecerían imposibles de resolver, pero en estas circunstancias viene en nuestro auxilio la virtud teologal de la esperanza. San Juan Pablo II afirmó en una ocasion: «El Espíritu Santo posee una inventiva infinita, propia de una mente divina, que provee a desatar los nudos de los sucesos humanos, incluso los más complejos e impenetrables» (Citado por el papa Francisco en la EG n. 178) No podemos resolver todo, pero "a Dios rogando ... " y con las manos ayudando. Que el Señor, y María su amorosa Madre, Señora de la Esperanza, nos guíen como pueblo para la construcción del bien común y de un futuro cada vez más lleno de luz.
Dado hoy en Aibonito, Puerto Rico, a 30 de noviembre del año del Señor 2022 en la Fiesta de San Andrés, Apóstol.
LA ESPERANZA NO DEFRAUDA (Rom 5, 5)
¡MUCHAS FELICIDADES EN NAVIDADES Y AÑO NUEVO!
S.E.R. Mons. Rubén A. González Medina CMF Obispo de la Diócesis de Ponce Presidente de la CEP
S.E.R. Mons. Roberto 0. González Nieves, OFM Arzobispo Metropolitano de San Juan de Puerto Rico
S.E.R. Mons. Eusebio Ramos Morales Obispo de la Diócesis de Caguas Vicepresidente de la CEP
S.E.R. Mons. A o Figueroa Morales Obispo de la Diócesis de Arecibo, Secretario y Tesorero de la CEP Obispo de la Diócesis de Mayagüez
S.E.R. Mons. Luis F. Miranda Rivera, 0. Carm. Obispo de la Diócesis de Fajardo-Humacao