Tu rostro, mi Dios,
que veo en Jesús,
que hermoso se muestra,
que dulce es su voz.
En lo oscuro de esta noche
te busco !Oh Señor mío!
mas mi alcoba está vacía
Y no encuentro a Tu Persona.
Entonces me voy al Templo.
Te contemplo en el Sagrario.
Quisiera poder llevarte
y en mis adentros amarte.
Pero debo combatir
contra lo que nos separa
que no me deja sentir
que yo soy para mi Amado
y mi Amado es para mi
William Quintana Nieves - Junio 6, 2019 .
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