#226 - El Papa Francisco en su Encíclica "Laudato Si" sobre la preservación y cuido de la casa común, nuestro planeta, pone en alerta a todos los hombres de buena voluntad a que denuncien y actúen para que no siga su destrucción.
Nos dice el Papa en uno de sus números:
I. Contaminación y cambio climático
Contaminación, basura y cultura del descarte
20. Existen formas de contaminación que afectan
cotidianamente a las personas. La exposición
a los contaminantes atmosféricos produce un
amplio espectro de efectos sobre la salud, especialmente
de los más pobres, provocando millones
de muertes prematuras. Se enferman, por
ejemplo, a causa de la inhalación de elevados niveles
de humo que procede de los combustibles
que utilizan para cocinar o para calentarse. A ello
se suma la contaminación que afecta a todos, debida
al transporte, al humo de la industria, a los
depósitos de sustancias que contribuyen a la acidificación del suelo y del agua, a los fertilizantes,
insecticidas, fungicidas, controladores de malezas
y agrotóxicos en general. La tecnología que, ligada
a las finanzas, pretende ser la única solución
de los problemas, de hecho suele ser incapaz de
ver el misterio de las múltiples relaciones que
existen entre las cosas, y por eso a veces resuelve
un problema creando otros.
21. Hay que considerar también la contaminación
producida por los residuos, incluyendo
los desechos peligrosos presentes en distintos
ambientes. Se producen cientos de millones de
toneladas de residuos por año, muchos de ellos
no biodegradables: residuos domiciliarios y comerciales,
residuos de demolición, residuos clínicos,
electrónicos e industriales, residuos altamente
tóxicos y radioactivos. La tierra, nuestra casa,
parece convertirse cada vez más en un inmenso
depósito de porquería. En muchos lugares del
planeta, los ancianos añoran los paisajes de otros
tiempos, que ahora se ven inundados de basura.
Tanto los residuos industriales como los productos
químicos utilizados en las ciudades y en el
agro pueden producir un efecto de bioacumulación
en los organismos de los pobladores de zonas
cercanas, que ocurre aun cuando el nivel de
presencia de un elemento tóxico en un lugar sea
bajo. Muchas veces se toman medidas sólo cuando
se han producido efectos irreversibles para la
salud de las personas.
Hoy en el pueblo de Peñuelas, Puerto Rico, miles de toneladas de cenizas toxicas se están depositando en el vertedero de la compañía EC Waste procedentes de la Planta Generatriz AES, que quema carbón. Todo con el visto bueno y apoyo logístico del Gobierno de Puerto Rico, su gobernador y Jefes de Agencias y Legisladores. La comunidad Tallaboa Encarnación, aledaña al vertedero es la mas perjudicada y por eso lleva una confrontación pacifica frente a las fuerzas policiacas para evitar que se sigan derramando las cenizas.
Como católicos, escuchemos al Papa y actuemos acorde. Así estaremos ayudando a administrar la obra que Dios creó para nosotros.
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