Amoris Laetitia 61
ILUMINAR
CRISIS, ANGUSTIAS Y DIFICULTADES
231. Vaya una palabra a los que en el
amor ya han añejado el vino nuevo del noviazgo…allí aparece, florece en toda su
plenitud, la fidelidad de los pequeños momentos de la vida. Es la fidelidad de
la espera y de la paciencia. Esa fidelidad llena de sacrificios y de gozos…y
los ojos se ponen brillantes al contemplar los hijos de los hijos…Como enseñaba
san Juan de la Cruz, «los viejos amadores son los ya ejercitados y
probados»…gustan de la suavidad del vino de amor ya bien cocido en su sustancia
[…]
El desafío de la
crisis
232. La historia de una familia esta
surcada por crisis de todo tipo…no se convive para ser cada vez menos felices,
sino para aprender a ser felices de un modo nuevo… los matrimonios
experimentados y formados deben estar dispuestos a acompañar a otros en este
descubrimiento, de manera que las crisis no los asusten ni los lleven a tomar
decisiones apresuradas. Cada crisis esconde una buena noticia que hay que saber
escuchar afinando el oído del corazón.
233. La crisis inmediata es resistirse
ante el desafío de una crisis, ponerse a la defensiva por sentir que escapa al
propio control…Entonces se usa el recurso de negar los
problemas, esconderlos, relativizar su importancia, apostar sólo al paso del
tiempo. En una crisis no asumida, lo que más se perjudica es la
comunicación…poco a poco, alguien que era «la persona que amo» pasa a ser
«quien me acompaña siempre en la vida», luego sólo «el padre o la madre de mis
hijos», y, al final, «un extraño».
234. Para enfrentar una crisis se necesita
estar presentes. Es difícil, porque a veces las personas se aíslan para no
manifestar lo que sienten…en situaciones difíciles o criticas la mayoría no
acude al acompañamiento pastoral, ya que no lo sienten comprensivo, cercano,
realista, encarnado.
235. Hay crisis comunes…cuando hay que
aprender compatibilizar las diferencias y a desprenderse de los padres, o la
crisis de la llegada del hijo…la crisis de la crianza…la crisis de la
adolescencia del hijo…la crisis del «nido vacío», que obliga a la pareja a
mirarse nuevamente a si misma; la crisis que se origina en la vejez de los
padres de los cónyuges, que reclaman más presencia, cuidados y decisiones
difíciles.
236. A estas se suman las crisis
personales…relacionadas con dificultades económicas, laborales, afectivas,
sociales, espirituales.
237…. La sensación de no ser completamente
correspondido, los celos, las diferencias que surjan entre los dos, el
atractivo que despiertan otras personas, los nuevos intereses que tienden a
apoderarse del corazón, los cambios físicos del cónyuge….
240…. Por más que parezca evidente que toda la
culpa es del otro, nunca es posible superar una crisis esperando que solo
cambie el otro.
¿Cuál ha sido la mayor crisis en tu vida
de pareja o familia?
¿Cómo la superaste?
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