Mis manos
Has tomado, Señor, hoy mis manos
manchadas de tantos pecados.
Y en el agua bendita has lavado
todo el sucio que estaba pegado.
Mis manos, que fueron profanas.
Mis manos que fueron ingratas.
Mis manos, que te señalaron.
Mis manos que te maltrataron.
Aquellas que roban y matan.
Aquellas que escriben blasfemias.
Aquellas que en vicios trabajan.
Aquellas que el amor no entregan.
Has tomado, Señor, hoy mis manos
y en Tu gracia las has transformado.
Las libraste ¡Oh, Padre Querido!
pecadoras, de haberlas cortado.
Mis manos, donde hoy te posas.
Mis manos que hoy te saludan.
Mis manos que hoy no señalan.
Mis manos, que heridas hoy curan.
Aquellas que cuidan y salvan
Aquellas que escriben al Cielo.
Aquellas que sudan las horas
Aquellas que todo lo entregan.
Gracias, Señor, por mis manos
que a ti alzo en alabanza.
Gracias, Señor, que al rehacerlas
nuevamente son Tus manos.
William Quintana Nieves
10 de abril de 1996
No hay comentarios.:
Publicar un comentario